Argentina necesita reinstalar la cultura del trabajo digno y productivo, y de una economía más humana y solidaria

La Economía Humana , la economía solidaria tiene por objetivo el trabajo productivo y el bienestar humano como fin. Dicha economía busca gennerar puestos de trabajo en condiciones dignas , o sea "no explota a nadie, no es especulador ni practica la usura"; existe una vocación de servicio (trabajo), vocación democrática, solidaridad y deseo de justicia para todos y por todos (Bien Común).

Dicha economía llamada tercer vector ( o vía intermedia) , es la del futuro, porque ubica al dinero como medio y no como fin, y le devuelve al trabajo su espíritu de servicio dignificador del ser humano.No debemos olvidar que es con el Trabajo (cualquier trabajo) que se reconstruye el sentimiento de valor interior, y es como se derrota genuina y realmente la desesperación , la exclusión. la postergación, la delincuencia. la droga , que trae la la pobreza- la indigencia ( y no con políticas sociales en donde la dádiva,subsidios y con planes asistenciales que son indefinidas).No importa cuán insignificante sea, el trabajo es el que nos da un marco para el crecimiento y punto de partida para llegar a algo más alto como persona y como sociedad.

Al tomar conciencia de esta progresiva deshumanización, es ver como conjugar la libre iniciativa eficacia la innovación tecnológica, con la creatividad de personas y/o grupos, la asistencia y promoción de los sectores socialmente postergados (que hoy es cada día mayor), como la valoración del asociativismo cooperativas, de la pequeña y mediana empresa y de la empresa familiar.

La crisis estructural en nuestro país es no solo en lo económico, sino también en lo social, político, institucional, territorial y humana, no se debe ver ni como principal, ni como exclusiva y única causa, en lo puramente económico; si nos quedamos con dicha reflexión, es no ver la situación de raíz ; que es lo que nos permitirá restaurar nuestro país; debemos por lo tanto abordar esta crisis estructural conforme a los Valores Principios Eticos. Por lo tanto tenemos que hacer el esfuerzo para levantarnos de dicha situación, y luchar con convicción, comunicar nuestro sentir (cultura del ser), nuestra esperanza, nuestra solidaridad, nuestra ciencia, nuestro trabajo productivo; evitando perder de vista el sentido de nuestro real valer, y confianza en que podemos mejorar entre todos, con las riquezas, las capacidades, la buena voluntad de las personas, respetando y haciendo respetar a la persona, su dignidad, la cultura de la solidaridad, los derechos humanos y la cultura de la paz.

Por ello debemos concientizar sobre nuestra identidad, como así también ser factor generador de confianza mutua, para rescatar y reivindicar el llamado capital social como agente constructor de la democracia participativa. De forma tal que al reivindicar nuestras raices, nuestra identidad e impulsar la Cultura de la Solidaridad, podamos pasar del modelo asistencialista al modelo económico productivo con solidaridad.

Por lo tanto es indispensable para lograr lo mencionado precedentemente, luchar con propuesta y dando genuinana cabida tanto al compromiso como a la iniciativa ciudadana en la elaboracion de la politicas publicas productivas. Dado que el impacto desigual de la globalización económica puede superarse mediante la citada toma de conciencia y a partir de ella construir un modelo de economía solidaria, que al contar con su base humanista , es un instrumento socioeconómico válido y sustentable entre lo Público y lo Privado. De forma tal, que esta llamada 3ra vía (o vía intermedia) entre el Estado y la actividad privada, sea el camino en la construcción de una economía mas justa, humana y equitativa. Debemos tratar de ver en el impulso y desarrollo de la economía solidaria, como la puesta en practica efectiva para que el ser humano se convierta en sujeto y autor de su propio crecimiento y desarrollo. Dado que con la misma, se podrá desarrollar el potencial humano y permitir el espacio necesario para dar participación ciudadana en el impulso y fortalecimiento del proceso socio económico productivo.

Creemos que solo se alcanzará los mencionados objetivos para que funcione el estado de derecho, la democrácia representativa - participativa y la real vigencia de la rapública, si se educa y capacita para construir el modelo económico con solidaridad , evitando todo tipo de deformaciones, uso, y abusos. Y mas en el mundo globalizado de hoy, que se distingue por los grandes avances humanísticos, científicos, comunicacionales, informáticos, robóticas, etc.; y que a la vez muy contradictoriamente también constatamos como se agudiza cada vez mas, el alto porcentaje de las personas en situación de indigencia, de extrema pobreza, precariedad, exclusión. Por lo tanto debemos impulsar y fortalecer el trabajo productivo, la cultura de la Solidaridad (Cultura del Ser) ,. que creará conciencia y podrá posicionar el modelo de una economía humana y solidaria en nuestra patria; donde el asociacionismo (cooperativismo), la pequeña y mediana empresa y la empresa familiar( como instrumentos socioeconómicos concretos), serán una alternativa valida y eficaz que el Gobierno tanto Provincial y Nacional deben adoptar como política de estado, en favor del interés social , la distribución de las riquezas en forma distributiva y el bien colectivo.

PLEGARIA POR EL TRABAJADOR

De la obra: "Te Deum"
Capítulo III


Del laborioso trabajador
Señor, ten piedad
Que no sea amargo el pan
Ni sus viandas estén vacías
Por su mal pagado esfuerzo

Del sudor de su trabajo
Señor, ten piedad
De aquella afrenta heredada
Por Adán, el primer hombre,
Liviana sea la carga impuesta.
Pon sabiduría e inteligencia
en sus mentes no capacitadas,
-beneficios de pocos.

Que sea oportuno el pago
De sus voluntarias jornadas
Porque oportunas se cobran
La merienda y las deudas.
No retenga el rico en su mano
El peculio pactado y merecido
Sino, añada en forma humana
Por amor a si mismo.

De sus extensas horas líbralos
Para que no hurte de su familia
El tiempo del beso y la caricia
Ni de su descanso niegue
A sus huesos y párpados.

De sus días de enfermedad
Señor, ten piedad
De la inoportuna fiebre o accidente
Visitantes insolentes y lucrativos
Para que no maten el cuerpo
Tampoco sus sueños

En el día del cese de su obra
Señor, ten piedad
Aquel miedo del despido inadvertido
Paralizante terrorista suelto.
En ese día, encuentre comprensión
Aliento a su alma, y otros lugares
Donde continúe construyendo
su propia obra. La obra de su vida.